martes, 24 de octubre de 2017

Viajar*


Me gusta viajar sola, me gusta mucho viajar acompañada, en realidad lo que me gusta es viajar y ante la tesitura de viajar sola o no hacerlo por no hacerlo sola, yo siempre opto por hacerlo.

Este verano que apenas ha finalizado he viajado por primera con una organización que organiza viajes culturales para mujeres que viajan sola.

Hemos sido siete mujeres viajando a la isla de Creta, que nos conocimos en el aeropuerto; por hacer un breve resumen diré que lo he pasado muy bien y ha sido una gran experiencia, os la recomiendo a todas.

Una de las cosas que me ha llamado la atención es que aún hay mujeres a las que le asusta la posibilidad de dar un paso sola; uno de los días del viaje que tuvimos la mañana libre antes de hacer una ruta, hablamos entre nostras y acordamos que esa mañana cada una iría a su ritmo, porque cada una quería emplear el tiempo de una manera y la libertad personal parecía la mejor opción para no caer en roces inútiles.

Todas estuvimos de acuerdo, salvo una, que palideció ante la perspectiva de tener que dar un paso sola en un hábitat que no es el suyo, nunca se me va a olvidar la cara triste que puso, aunque ella nada manifestó en voz alta.

Ella traía el pudor y el miedo de casa, en las muchas conversaciones que tuvimos esos días, era la única que apenas tenía vida social, en su entorno las mujeres sin pareja no hacen eso.

Y eso es lo que hay que cambiar, el entorno, la sociedad, porque nadie tiene derecho a hacerle sentir a una mujer que es menos independiente, válida y segura por el hecho de serlo. Compartir es maravilloso, ser una mujer libre sin presiones, mucho más.

*Este texto fue publicado en primer lugar en la web de Radio Huelva de la cadena ser.

Pd.: En el siguiente enlace: Plaza Niña hacia abajo en la página podéis encontrar Plaza Niña: un espacio dedicado a la mujer.